Resulta sorprendente descubrir las presas españolas anteriores al franquismo, presas, como esta de Zalamea, construida a finales del siglo XVIII, que embalsa las aguas del río Ortigas y que, por medio de un sistema de canalizaciones, se utiliza para regar unas 250 hectáreas en el entorno de San Cristóbal de Zalamea, (una pedanía de Zalamea de la Serena, más conocida como Docenario), en la comarca de la Serena (Badajoz) comarca de bellas llanuras onduladas, de Dehesas y buen queso de oveja, con pocas sorpresas orográficas, que sin embargo, se quiebra con paisajes atractivos en esta zona de la sierra de la Ortiga. En épocas anteriores, sus aguas eran utilizadas para moler en el molino que tiene adosado a los contrafuertes de la presa. Las presas de contrafuertes tienen una pared que soporta el agua y una serie de pilares, de forma triangular, que sujetan la pared y transmiten la carga del agua a la base. Sus impulsores fueron el Marqués de Casa Mena y las Mat
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