Dallas C. Wiens sufrió hace dos años un terrible accidente mientras estaba pintando una iglesia, su cara fue quemada por un fallo eléctrico y en consecuencia perdió la vista y su cara quedó poco menos que reducida a una calavera. Doctores pudieron hacerle un implante de piel y músculo de la espalda pero aún así Dallas nunca pudo recuperar sus labios, nariz e incluso cuencas de los ojos. Actualmente está postulado como uno de los posibles candidatos para recibir un transplante de cara que sería
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