Helga Zepp-LaRouche subrayó la urgencia de suspender las llamadas Sanciones César contra el pueblo de Siria, en respuesta al llamado del cardenal Zenari para poner fin a las sanciones. No hay nada “humanitario“, declaró ella, en matar de hambre a los niños y en cerrar hospitales y la atención médica, sobre la base de otra narrativa fraudulenta más inventada por las redes del Reino Unido y Estados Unidos que promueven los “cambios de régimen”. Debemos insistir en que todo funcionario que no se pronuncie en contra de este fraude es cómplice de cada muerte que ocurre en Siria y en Yemen.
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