Putin = Trump = Hitler = El Diablo. ¡Fácil! ¿Por qué no lo entiendes, apologista de Putin! ¡Los rusos deben pagarte para decir esto! (Esto = cualquier cosa sensata sobre el conflicto OTAN-Rusia y la guerra por poder en Ucrania). Mientras que esta forma de razonar simplista e infantil es, por un lado, claramente un crecimiento psicológico de la lógica de guerra que puede colonizar los cerebros de incluso los intelectuales más inteligentes y convertirlos en belicistas sedientos de sangre, esta línea de argumentación que ha sido impulsada al menos desde 2016—desde que Trump venció de manera dramática a la Jefa Neocon Hillary Clinton—también sirve como una excusa conveniente para todos y cualquier fracaso doméstico en los países del Oeste Colectivo. En caso de problemas, solo culpa a Putin. El diablo en el Kremlin hará que todas tus penas desaparezcan. La dinámica de la psicología de masas en Occidente ha a
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