Los residentes que viven cerca de la frontera entre Estados Unidos y México encontraron una oportunidad para ganar dinero recogiendo y revendiendo las cosas abandonadas cerca del Río Bravo. Después de caminar durante semanas o meses, los migrantes tienen que cruzar el río en el lado mexicano para llegar al territorio estadounidense. A menudo, se ven obligados a dejar todas sus pertenencias en la orilla. En los últimos 12 meses, el récord de 2,7 millones de inmigrantes han cruzado la frontera entre Estados Unidos y México, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos.
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