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¡Vuelve el héroe! ¡Vuelve la acción! ¡Vuelve la magia! ¡Y esta película sólo tiene en común con al primera... el título! Deathstalker vuelve a hacer de las suyas pero con un cambio de clase. Del fornido GUERRERO de espada a dos y una mano (sin darse importancia) con arco incorporado, pasamos a la clase LADRÓN con Carisma 20 y un 30% más de decorados de corchopan. ¡No te pierdas esta aventura con un 20% de escenas sacadas de la anterior película. Deathstalker (o Stalker para los amigos) deberá acompañar a una presunta adivina para enfrentarse y vencer a un malvado hechicero de turno de lo más chusco. Como todo en esta puta película Roger Corman seguía timando a productores argentinos o blanqueando dinero de la mafia, ¿quién sabe? y nos trajo una secuela que nadie pidió. Apenas hay sangre, pero las tetas compensan.
