La longevidad de la dictadura de los Somoza tenía un sólido fundamento: el respaldo político, financiero y militar de . Al caer la dinastía, Washington intentó retener el control sobre el país, apoyando a los movimientos contrarrevolucionarios. Este hecho fue reconocido por la Corte Internacional de Justicia de La Haya en 1986.
Hide player controls
Hide resume playing