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El pasado día 30 de marzo, la Hermandad de Barcelona, en unión con la Hermandad de Defensores de Oviedo, procedió a la realización de un pequeño acto de presentación de esta ultima, proyectándose un CD elaborado por dicha Hermandad de Defensores de Oviedo, con documentales de época, un reportaje fotográfico de los vestigios actualmente existentes de la gesta y, una pequeña charla introductoria y contextualizadora sobre el sitio de Oviedo, su importancia y su relación con la División Azul, recordando que algunos de sus defensores formaron después en las filas de la división y, que otros divisionarios, tuvieron un papel destacado en el auxilio y liberación final de la ciudad asediada, entre otros, Aramburu Topete, que contribuyo decisivamente a la caída del frente norte y el levantamiento definitivo del asedio de la ciudad, al evitar con sus ingenieros la voladura de los dos puentes de Cangas de Onis, que habrían retrasado considerablemente las operaciones de liquidación del Frente Norte y, destacando la importante labor que ambas Hermandades hermanas realizan en la preservación de la memoria histórica en estos tiempos de ocultación y persecución. A continuación, aprovechando la proximidad de fechas se evoco el regreso del SEMIRAMIS, una gloriosa tarde del 2 de abril de 1954, recordando a nuestros cautivos y, proyectando un documental sobre el mismo. Por ultimo, se rindió en la persona de su nieto, un pequeño homenaje al divisionario ya fallecido, Francisco Martínez Navarro, de Badalona, que marcho al frente voluntario desde milicias con 16 años, combatiendo en la cabeza de puente, encuadrado en la 9ª cia del III Bon del 263 (Vierna), del capitán Ángel Campano López, participando en los combates de Tigoda y Nilkitkino, y encuadrado en la misma unidad, colaboro con el II Bon del 269 (Batallón Román) en los combates y acciones del rescate de Mal Zamoshe y defensa de Bol Zamoshe, y que en la noche del 15 de marzo del 42, con temperaturas inferiores a los -37º sufrió, con ocasión de la aproximación a la linea de fuego y acciones previas para el inicio de la operación “Predator“ para el cierre, reducción y aniquilación de la bolsa del Voljov, congelación de ambos pies, que requirió doble amputación, motivo este de su repatriación a España. Pese a ello, nunca perdió el espirito divisionario y, en 1954 fue uno de los Fundadores de la Hermandad de Barcelona, con el carne nº 38, siendo durante muchos años nuestro delegado en Badalona, donde realizo un importante trabajo de encuadramiento y asistencias con los guripas. Nos honraron con su presencia el divisionario Diego Castillejo Sabio y, en representación de su esposo, Francisco Armengou Casanovas, que excuso su asistencia por motivos de salud, su esposa Ligia. Desde la resistencia Española en Cataluña un saludo.
