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El volcán de la Palma sigue demostrando que es imprevisible. En los últimos días parecía que su actividad se había estabilizado, sin embargo, esta madrugada ha aparecido una nueva colada que fluye a gran velocidad y que ha arrasado con el polígono industrial de La Laguna. Esta nueva lengua de magma fluye por el lado norte de la ladera del volcán. Hasta ahora, todas lo hacían por el oeste. Este agravamiento de la actividad ha hecho que la cara norte del cono de la erupción se haya derrumbado haciendo que la lava discurra con mayor fluidez y en mayor cantidad. Por el momento, los científicos descartan que surja una nueva boca de emisión y la sismicidad en la zona sigue localizada a gran profundidad. La fajana creada por la llegada de la lava en el mar sigue expandiéndose en dirección norte-sur y persiste el riesgo, según los expertos, de un derrumbe de esta plataforma si sigue avanzando a profundidades mayores, lo que podría generar gran
