La Iglesia Católica, la Iglesia de la Tradición fue sustituida por una Iglesia controlada por el poder político revolucionario. Así se procedió a la confiscación y venta de los bienes eclesiásticos, la supresión del diezmo, el matrimonio de los sacerdotes y monjas, la disolución de la órdenes religiosas y la prohibición de la sotana. La Constitución Civil del Clero dio paso a una nueva Iglesia centrada en la “Libertad, Igualdad y Fraternidad” de la masonería. En definitiva, una Iglesia nueva, constitucional, centrada en el hombre y no en Jesucristo. Pero la resistencia católica contrarrevolucionaria comenzó a organizarse. Contaremos con el historiador Javier Paredes. Agradecemos a nuestros patrocinadores: - Utiliza el código de descuento “sacristia“. - Especialistas en cardioprotección.
Hide player controls
Hide resume playing