Humillada por la desintegración del imperio soviético en 1991 y la década que siguió cuando el país quedó en manos de los oligarcas, la Rusia de Vladimir Putin recuperó su estatus de gran potencia a principios de la década de 2020 y está en busca de de nuevas conquistas. El colapso de la URSS sigue siendo el mayor desastre geopolítico del siglo XX en Rusia, porque al final de la Guerra Fría, Estados Unidos y Europa lo descuidaron. Todavía persiste un rencor histórico, por lo que después de un período en el que todavía esperaba ganarse a Occidente, el presidente Vladimir Putin se encuentra al frente de una Rusia cada vez más agresiva y determinada, advierte Andrei Grachev, historiador, comentarista político y ex vocero de Mikhail Gorbachev. De hecho, a pesar de un PIB apenas igual al de Italia y un presupuesto de defensa equivalente al de Francia, el oso ruso se ha convertido una vez más en un actor clave en el escenario mundial, desde Estados Unidos hasta China, la Unión Europea, Oriente Medio, África , y más recientemente el Cáucaso. No hay elecciones, conflictos o negociaciones que tengan lugar sin que Moscú ejerza su influencia. Esto podría tomar la forma de campañas en las redes sociales, negociaciones diplomáticas o acuerdos comerciales o militares, y el Kremlin parece más decidido que nunca a recuperar la grandeza pasada de su imperio. Vladimir Putin anunció este objetivo en 2007 en la conferencia de Munich sobre seguridad internacional. Sintiéndose incomprendido y menospreciado por sus socios occidentales, el presidente ruso denunció abiertamente el unilateralismo estadounidense y pidió el fin del mundo unipolar. Desde entonces, Putin ha fortalecido la seguridad fronteriza y ha tomado una serie de posiciones estratégicas, incluida la militarización del Ártico, forjando una asociación con China y la consolidación de la diplomacia del gas al oeste de sus fronteras, que fueron solo las primeras etapas de un nuevo estrategia que Rusia está implementando ahora en otros lugares. Por todo el Medio Oriente, África y el Cáucaso, Moscú está extendiendo inexorablemente su esfera de influencia, y ningún otro poder puede interponerse en su camino. Pero, ¿hasta dónde pretende llegar Rusia? ¿Qué tipo de mundo está dando forma?
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