La gira del mandatario iraní Ebrahim Raisi por Venezuela, Nicaragua y Cuba ha sido un acontecimiento que estuvo en los titulares de la mayoría de los medios, tanto dominantes como alternativos. Por supuesto que desde las cadenas que responden a los intereses de Estados Unidos salieron a atacar con furia esta visita, recurriendo a “analistas” de sospechoso currículum (por ejemplo, tener orden de detención en Venezuela o haber servido en la invasión estadounidense a Irak), que intentaron demonizar una vez más a la nación persa. Sin embargo, y anticipando este embate, expertos denunciaron que se trata de argumentos “vendibles a la opinión pública para tratar de alejar a estos actores de América Latina, ya que ese es el interés primordial de .”
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