La startup británica Imperium Drive lanzó un servicio de transporte conducido a distancia, llamado Fetch. Como cualquier otra aplicación similar, los clientes pueden solicitar un automóvil en línea pero, a diferencia de sus competidores, Fetch proporciona autos conducidos de forma remota por sus trabajadores. Los conductores remotos usan un volante y pedales diseñados originalmente para videojuegos.
Hide player controls
Hide resume playing