Si quieres vivir en paz, y no esa paz de una noche o un fin de semana, sino la verdadera Paz, que sólo Cristo Jesús te la puede dar, recíbelo en tu Corazón: --Repite con voz fuerte-- Señor Jesús: Yo confieso que soy un(a) pecador(a), y estoy arrepentido(a) de todo lo malo que hice contra tu palabra. Yo creo que moriste en la cruz, y resucitaste para salvarme y pagar la consecuencia de mis pecados. Señor Jesús, hoy te recibo en mi vida como a mi Señor y Salvador, Y confieso que: “Por creer en Ti“ Hoy estoy perdonado(a), soy salvo(a), y me haces hijo(a) de Dios Lléname del Espíritu Santo para que guíe mi vida. Y escribe mi nombre en el libro de la vida. Sé que me amas y decidido servirte por siempre. ¡Gracias Señor Jesús Amén.“ Si hiciste esta oración, Dios te perdona tus pecados, y desde ahora eres una nueva criatura, porque con Jesús en tu corazón, tu Espíritu que estaba muerto a causa del pecado, ahora vuelve a vida gracias al Espíritu Santo de Dios. Porque así como Jesús nació por obra y gracia
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