El Delegado del Gobierno impidió que el habitual rezo del Santo Rosario tuviera lugar en la esquina de Ferraz con Marqués de Urquijo. Si nosotros no luchamos por nuestros derechos, ¡nadie lo hará! La libertad religiosa es de todos y ni el Delegado, ni el presidente del Gobierno ni ningún político, nos la puede quitar. NOS ADHERIMOS AL SIGUIENTE MANIFIESTO: Más información: - -
Hide player controls
Hide resume playing