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Un contratista de Dior en Italia explotaba mano de obra inmigrante de China y Filipinas para la producción de bolsos, escribe el medio “Corriere della Sera“. Se trata de dos empresas de la provincia de Milán que cosían bolsos bajo un esquema de subcontratación. Allí trabajaban unas 20 personas de origen chino y varios filipinos. Los inmigrantes ilegales vivían y dormían en el trabajo. Sus baños estaban “en un nivel ético mínimo“. El coste de fabricación de bolsas premium era de sólo 53 euros y el precio de venta al público de 2,6 mil euros. Cosas del capitalismo. Ayúdanos a llegar a más personas, síguenos, danos un “Me gusta“ y comparte si te gusta lo que publicamos. #economia #Italia #capitalismo #Dior
