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Entre 1492 y 1898, los españoles construyeron un total de 52 monumentos en sus territorios y Virreinatos, los cuales hoy son reconocidos por la UNESCO como verdaderas joyas del patrimonio mundial. Sin embargo, la historia no se detiene ahí; en la actual España, se encuentran 41 sitios adicionales que han perdurado a lo largo de los siglos, otorgando al país una riqueza cultural incomparable. En un contraste notable, ninguna de las excolonias de otros grandes imperios, como el Británico, el Francés o el Holandés, ha conseguido inscribir un solo sitio como Patrimonio de la Humanidad, lo que resalta aún más la singularidad del legado español. Este recorrido no es solo un catálogo de monumentos, sino una exploración del arte, la educación y un espíritu inclusivo que ha trascendido fronteras y se mantiene vivo en la identidad global. La comparación entre imperios revela la preeminencia cultural de España, desafiando la percepción
